Millepora, llamado también coral de fuego, es el único género de coral de la familia Milleporidae del orden Anthoathecata. Se le encuadra en el grupo de los denominados falsos corales duros, o hydrocorales, ya que pertenece a la clase Hydrozoa, y, por tanto, el animal tiene fase pólipo y fase medusa, característica que no poseen el resto de corales enmarcados en la clase Anthozoa.
Su esqueleto está compuesto de carbonato de calcio. Tras la muerte del coral, su esqueleto contribuye a la generación de nuevos arrecifes en la naturaleza, debido a que la acción del CO2 convierte muy lentamente su esqueleto en bicarbonato cálcico, sustancia ésta asimilable directamente por las colonias coralinas.
El Registro Mundial de Especies Marinas acepta las siguientes especies,[1] valoradas por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza,[2] en cuanto a sus estados de conservación:
No obstante, el género Millepora, como otros muchos del filo Cnidaria, está siendo sometido tanto a análisis filogenéticos, como a otras investigaciones que los avances tecnológicos y científicos actuales permiten. Lo que mantiene a varias especies del género en situaciones de duda sobre su validez y/o asignación taxonómica. Debido a ello, el Registro Mundial de Especies Marinas, tras asignar a otros géneros muchas de las especies atribuidas hasta hace poco a Millepora, reseña las siguientes situaciones inciertas:
Las colonias alcanzan alrededor de 2 m,[3] aunque pueden crecer varios metros de diámetro, y se desarrollan masivamente en diversas formas: incrustante, ramificada, hoja o loma. Sus estructuras calcáreas son más frágiles que los esqueletos usuales de los corales duros, orden Scleractinia. Es frecuente que las formas incrustantes invadan ejemplares de gorgonias marinas para desarrollar la colonia.
El esqueleto colonial o coenosteum está repleto de diminutos poros, generalmente de forna circular, aunque ocasionalmente aparecen poros estrellados, como con los septos de los corales escleractinios. La densidad de los poros sobre la superficie colonial oscila, según la especie, entre 167 y 303 poros/cm².[4] Los poros son de tres tipos: gastroporos, dactyloporos, y ampullae, que están relacionados con los tres tipos de pólipos que posee el animal. Los gastroporos tienen, aproximadamente, el doble de diámetro que los dactyloporos, siendo la media de estos últimos de ± 0,13-0,14 mm, frente a ± 0,26-0,28 mm en los gastroporos. Los dactyloporos están dispuestos, en número de 3 a 9, formando círculos alrededor de cada gastroporo, en una estrategia para ganar eficiencia a la hora de digerir mediante los gastroporos las presas capturadas con los tentáculos de los pólipos dactylozoides.[5] Esta disposición de los poros se denomina ciclo-sistema de Millepora, y su ocurrencia prolifera más en las partes en crecimiento de la colonia, quedando reducida o, incluso desprovista, la presencia de poros en las partes en sombra, crípticas, o con nódulos o verrugas. La especie M. exaesa al parecer carece de esta sistemática disposición de ciclos de poros, debido a que la superficie de su corallum está plagada de nódulos, aunque en las partes en crecimiento de sus colonias aparecen grupos de, incluso, 10 dactyloporos alrededor de un gastroporo.[4]
Nematocisto ovoide de M. exaesa: a) La célula expandida b) La célula con el hilo totalmente enroscado
Como pertenecientes a la clase Hydrozoa, sus pólipos son diferentes y tienen diferentes funciones que las de los corales de la clase Anthozoa. La clase Hydrozoa posee fases pólipo y medusa (craspedotas) y sus gónadas están en las zonas epidérmicas.[6]
Se trata de un animal que posee diferentes pólipos especializados, unos son defensivos, otros son de alimentación, y otros más son de reproducción. Los dactilozoides son defensivos y, al tiempo, su principal herramienta para captar alimento; tienen entre 0,1 y 0,3 mm de diámetro, permanecen en cavidades bajo la superficie del coral y emergen por la noche a través de los poros. Poseen tentáculos finos, como pelos, que presentan unas células urticantes denominadas nematocistos, empleadas en la caza de presas de plancton o para defender su espacio vital de otras especies. Los gastrozoos son los pólipos encargados de distribuir el alimento por la colonia, a través de una red de canales que recorre el cenénquima o tejido común colonial. Los pólipos gonozoides, se encuentran en cámaras incrustadas en el coenosteum, y son los encargados de la reproducción.[7]
Los Millepora tienen tres tipos de nematocistos: stenoles, isorhizas y mastigoforos macrobasicos,[8] estos últimos son únicos del género, lo que, en ocasiones, sirve de clave para su identificación. En el caso de los Millepora, los nematocistos son muy urticantes, lo que es el origen de su nombre común, coral de fuego.
El color del cenénquima, o tejido común que reviste el esqueleto, puede ser marrón, gris o verde, aunque también presenta el amarillo, naranja o, el más común mostaza.
Viven en casi todas las diferentes zonas de los arrecifes localizados en las zonas tropicales (a una latitud situada entre 30ºN y 20ºS), aunque dónde más abunda es en aguas soleadas y expuestas a fuertes corrientes mareales.
Habita normalmente entre 2 y 40 m de profundidad, aunque se reportan localizaciones entre 0.5 y 109.37 metros, y en un rango de temperaturas entre 19.81 y 28.86ºC.[9]
Se distribuyen desde las costas occidentales del océano Atlántico, y la costa oriental africana, pasando por el mar Rojo, el océano Índico y el Pacífico oeste, hasta las islas del Pacífico central.
Contienen algas simbióticas, mutualistas (ambos organismos se benefician de la relación), llamadas zooxantelas. Las algas realizan la fotosíntesis produciendo oxígeno y azúcares, que son aprovechados por los pólipos, y se alimentan de los catabolitos del coral (especialmente fósforo y nitrógeno).[10] Esto les proporciona entre el 70 y el 95% de sus necesidades alimenticias. El resto lo obtienen atrapando plancton y materia orgánica disuelta en el agua.
Se reproducen asexualmente mediante gemación, y sexualmente, expulsando medusas al agua desde unas estructuras llamadas ampullae. Las medusas contienen los órganos reproductores que lanzan al exterior los huevos y el esperma.[11] En este tipo de reproducción, por tanto, la fecundación es externa. Los huevos fertilizados, una vez en el exterior, permanecen a la deriva arrastrados por las corrientes varios días, más tarde se forma una larva plánula[12] que cae al fondo, se adhiere a él y comienza su vida sésil, secretando carbonato cálcico para conformar un esqueleto individual, posteriormente se reproducen por gemación, dando origen a la colonia, y al esqueleto colonial, denominado coenosteum o corallum.[13]
Las Millepora prefieren fuertes corrientes de agua y alta iluminación. Conviene vigilar el nivel de calcio con frecuencia, debido a su alto consumo. Se recomienda un acuario maduro y estable.
Millepora complanata, en Bonaire
Millepora dichotoma, Egipto, Mar Rojo
Millepora exaesa en Guam
Millepora tenera en Reunión
Para la edición de este artículo se ha empleado parcialmente la plantilla de taxón de la edición inglesa del mismo género. Asimismo, se ha empleado texto de Arkive.org, con licencia Creative Commons.
Millepora, llamado también coral de fuego, es el único género de coral de la familia Milleporidae del orden Anthoathecata. Se le encuadra en el grupo de los denominados falsos corales duros, o hydrocorales, ya que pertenece a la clase Hydrozoa, y, por tanto, el animal tiene fase pólipo y fase medusa, característica que no poseen el resto de corales enmarcados en la clase Anthozoa.
Su esqueleto está compuesto de carbonato de calcio. Tras la muerte del coral, su esqueleto contribuye a la generación de nuevos arrecifes en la naturaleza, debido a que la acción del CO2 convierte muy lentamente su esqueleto en bicarbonato cálcico, sustancia ésta asimilable directamente por las colonias coralinas.
Ognjene korale (znanstveno ime Millepora) so skupina kolonijskih trdoživnjakov, na videz podobne pravim koralnjakom, ki prebivajo na koralnih grebenih Atlantskega, Indijskega in Pacifiškega oceana ter Karibskega morja.[2]
Ognjene korale imajo svetlo rumeno-zeleno do rjavo ogrodje in rastejo v obliki grmičkov ali kupol na skalah in koralah do globine 40 m. Zunanje ogrodje je zgrajeno iz apnenca. Polipi trdoživnjakov, torej tudi polipi ognjenih koral, so za razliko od polipov koralnjakov mikroskopske velikost in so večinoma obdani z zunanjim ogrodjem ter med sabo povezani s številnimi majhnimi kanali. Na razmeroma gladki površini ogrodja so vidne številne majhne odprtine (pore) dveh vrst: daktilopore in gastropore. Iz tega izhaja znanstveno ime Milleropora, ki dobesedno pomeni »tisoč odprtin«.
Prebivajo na koralnih grebenih v vseh tropskih in subtropskih morjih. Ponekod tvorijo obsežne kolonije, ki dominirajo nad ostalimi koralami.
Iz daktilopor štrlijo dolge in tanke dlačice, ki so del t. i. »obrambnih« polipov. Na dlačicah se nahajajo številne ožigalne celice (nematociste), s katerimi ujamejo in onesposobijo plen, katerega pričnejo prebavljati prebavni polipi v gastroporah. Ognjene korali poleg tega živijo v sožitju z algami iz rodu Symbiodinium, ki preko fotosinteze korale preskrbujejo s hranili, v zameno za to pa jih korale ščitijo in omogočajo ugodno mesto za dostop do sončne svetlobe.
Na ognjene korale se pogosto naselijo mnogoščetinci Spirobranchus giganteus, ki v koralo izvrtajo luknjo in zgradijo cevko, v kateri varno bivajo, navzven pa štrlita dve lovki s peresastimi izrastki, ki sta podobni »božičnemu drevescu«.[3]
Razmnoževanje ognjenih koral vključuje stadij polipa ter stadij meduze in je tako bolj zapleteno kot pri drugih koralah na grebenih. Z brstenjem na polipih nastanejo ličinke, imenovanje efire, ki se od polipov nato odcepijo. Iz efir se razvije stadij meduze, ki se razmnožuje spolno z zunanjo oploditvijo. Iz oplojenih jajčec se razvijejo prosto plavajoče ličinke (planule), ki se naselijo na morskem dnu in ustvarijo nove kolonije. Ognjene korale se razmnožuje tudi nespolno s fragmentacijo.
Glavna sestavina strupa ognjenih koral je visoko-molekularna beljakovina, ki je do sedaj bila izolirana iz M. alcicornis in M. tenera. In vitro ima toksin hemolitične lastnosti ter povzroča nekrozo kože. Raziskave so sicer težavne zaradi velike nestabilnosti te beljakovine.
Potapljači, pa tudi kopalci, nemalokrat zamenjajo ognjene korale z morsko travo, zaradi so ožigi doka pogosti. Po dotiku se takoj pojavi bolečina, ki je podobna ožigu klobučnjakov, prizadeti del kože pordi in malo zateče. Ravno po tej »zloglasni« bolečini so ognjene korale tudi dobile svoje ime. Hujša reakcija se pojavi na občutljivejših deli kože, kot so ustnice ter predeli okoli oči in spolovil. V nekaterih primerih se pojavi koprivnica (urtikarija), ki pa po enem dnevu po navadi izgine. Simptomi ožiga hitro minejo, vendar lahko vztrajajo tudi do nekaj dni.
Najboljša preventiva je izogibanje dotika z ognjenimi koralami. Kožo pred ožigom ščitijo že lahko oblačila, ki morajo pokrivati izpostavljene ude. Zaradi navadno blage simptomatike prva pomoč ob ožigu ni potrebna. Ob hujših oz. vztrajajočih simptomih je na prizadeti del kože priporočljivo nanesti kis ali 40-70 % izopropilni alkohol.
Tako kot drugi organizmi, ki prebivajo na koralnih grebenih, so tudi ognjene korale ogrožene zaradi človeških posegov v naravo, kot so nalaganje kopenskega sedimenta, onesnaževanje, nenadzorovan ribolov, ki poškoduje krhko strukturo koral in povzroči prekomerno razmnoževanje alg zaradi pomanjkanja rib, potapljaške aktivnosti, lov eksotičnih vrst koralnih rib za akvarije, ki se rade skrivajo med ognjenimi koralami ipd.[4][5]
Ognjene korale (znanstveno ime Millepora) so skupina kolonijskih trdoživnjakov, na videz podobne pravim koralnjakom, ki prebivajo na koralnih grebenih Atlantskega, Indijskega in Pacifiškega oceana ter Karibskega morja.