Sedum brevifolium, el arrocillo de los muros, es una planta de la familia de las crasuláceas.
Hierba vivaz, verdosa, rojiza o rosada, densamente cespitosa. Tallos erectos, simples o poco ramificados, algo leñosos en la base, de hasta 14 cm de altura. Hojas de ovoideas a subesféricas, de hasta 2(-3) mm de diámetro, carnosas; las hojas de los tallos floríferos son casi opuestas, las de los tallos estériles se disponen densamente imbricadas en 4 filas: Flores situadas al final de los tallos; 5 sépalos ovados de hasta 1,5 mm de longitud; 5 pétalos libres de 3-5 mm, de color blanco o algo rosado; con franjas longitudinales marrones o rojizas; 10-12 estambres. Fruto constituido por varios folículos glabros de 2-3,5 mm de longitud. Florece en primavera y verano.[1]
Frecuente en prados de cumbres, pedregales, fisuras de rocas.
Nativa del norte de África : Marruecos, del sur de Europa: Francia, incluida Córcega; Italia, incluida Cerdeña; Portugal y España (incluido Andorra), donde se encuentra esparcida por todo el territorio peninsular, excepto el litoral del Levante.[2][3]
Sedum brevifolium fue descrita por Augustin Pyrame de Candolle y publicado en Mémoires de la Société d'agriculture du départment de la Seine 2: 79 1808.[4]
Ver: Sedum
brevifolium: epíteto latino que significa "con hojas pequeñas".[5]
Sedum brevifolium, el arrocillo de los muros, es una planta de la familia de las crasuláceas.
En su hábitat Detalle de las hojas