Eristalis es un numeroso género de dípteros braquíceros de la familia Syrphidae (moscas de las flores). Una especie muy común de este género es Eristalis tenax. Son polinizadores, y sus larvas son acuáticas, y respiran con un largo esnórquel. Los adultos, totalmente inofensivos, mimetizan las abejas.[2]
Miden 7 a 17 mm de largo. Están cubiertos de vello desde moderado a abundante. La cabeza es más ancha que alta y suele ser del ancho del tórax o más ancha. Las antenas son cortas con el tercer segmento más largo. Los ojos pueden tener pelos o no. Los machos tienen ojos más grandes que las hembras a tal punto que en algunas especies se tocan arriba de la cabeza. El abdomen suele tener bandas amarillas y de color oscuro.[3]
Son de distribución holártica. Las larvas se alimentan de pequeños organismos acuáticos. A los adultos se los encuentra en prados o campos. Se los ve a menudo visitando flores, donde se alimentan de néctar.
En raros casos la ingestión accidental de huevos, cuyas larvas sobreviven en el intestino, puede causar trastornos digestivos llamados miasis.[4]
El género Eristalis se subdivide en varios subgéneros y grupos de especies: (Eristalomyia, Eristalis, Eoeristalis etc.).[5] Las especies incluyen:
Eristalis es un numeroso género de dípteros braquíceros de la familia Syrphidae (moscas de las flores). Una especie muy común de este género es Eristalis tenax. Son polinizadores, y sus larvas son acuáticas, y respiran con un largo esnórquel. Los adultos, totalmente inofensivos, mimetizan las abejas.
Miden 7 a 17 mm de largo. Están cubiertos de vello desde moderado a abundante. La cabeza es más ancha que alta y suele ser del ancho del tórax o más ancha. Las antenas son cortas con el tercer segmento más largo. Los ojos pueden tener pelos o no. Los machos tienen ojos más grandes que las hembras a tal punto que en algunas especies se tocan arriba de la cabeza. El abdomen suele tener bandas amarillas y de color oscuro.
Son de distribución holártica. Las larvas se alimentan de pequeños organismos acuáticos. A los adultos se los encuentra en prados o campos. Se los ve a menudo visitando flores, donde se alimentan de néctar.
En raros casos la ingestión accidental de huevos, cuyas larvas sobreviven en el intestino, puede causar trastornos digestivos llamados miasis.